A partir de los cuarenta y cinco años más de la mitad de los ciudadanos utilizan espejuelos o lentillas de contacto, sobre todo para corregir la presbicia o vista cansada. Pero en muchos casos, ya sea por dejadez o por desconocimiento, no tienen la graduación adecuada.
Imagen:El oftalmólogo es el profesional más adecuado para determinar qué tipo de lentes precisa el afectado por una patología ocular
Hipermetropía, miopía, daltonismo, astigmatismo y presbicia son las principales patologías de la visión.
Estas obligan al afectado a graduarse la vista y a recurrir a las espejuelos o a las lentillas de contacto para corregir los defectos derivados de esa mala visión.
La hipermetropía es un defecto que consiste en enfocar los objetos detrás de la retina, mientras que en el ojo normal los rayos de luz convergen exactamente sobre ésta. El hipermétrope tiene problemas de visión en distancias cortas, mientras que puede ver con mayor claridad en distancias largas.
La miopía se genera cuando el ojo es ligeramente más largo que el promedio, lo que causa que los rayos de luz se enfoquen en la zona anterior de la retina, en vez de hacerlo en su superficie, como sería lo normal. De ahí que los miopes experimenten visión borrosa de los objetos distantes y tensión ocular.
El daltonismo, más frecuente en los varones, es un defecto de la visión que no permite distinguir colores y está asociado a un defecto genético de la retina, o bien de los nervios oculares.
El astigmatismo, que suele ser hereditario, se caracteriza por un problema en la curvatura de la córnea, que deriva en visión borrosa y distorsionada, de los objetos cercanos y lejanos.
VISTA CANSADA
La presbicia, más conocida vulgarmente como vista cansada, es el proceso natural de envejecimiento de una parte del ojo denominada cristalino. Los síntomas consisten en una dificultad para enfocar bien de cerca y comienzan a acentuarse en torno a los 45 años, más en hombres que en mujeres.
Durante el 85 Congreso Nacional de Oftalmología, celebrado en septiembre de 2009 en Santander (norte de España), el oftalmólogo Humberto Carreras se mostró más radical en relación con esta patología de la vista y consideró que la presbicia afecta al “cien por cien de la población, a partir de los 40 ó 45 años”, sin hacer distinciones de sexo o raza.
El especialista explicó que el debilitamiento progresivo del músculo que acomoda el cristalino para el enfoque no es una cuestión patológica sino un fenómeno fisiológico del que “nadie escapa” porque sobreviene con la edad.
En ese mismo congreso se expuso que la presbicia podría ser corregida en un futuro próximo por medio de una nueva operación con láser que se ha ensayado en varios pacientes con buenos resultados. Ahora hay que esperar un tiempo hasta conocer la evolución de los operados y si esa intervención sería una solución casi definitiva para acabar con la afección oftalmológica más común entre la población madura.
LENTES “VIEJAS”
Frente a estas propuestas de la oftalmología más avanzada para corregir problemas de la visión, se impone una realidad más regresiva mediatizada por la situación económica.
Así, un estudio reciente realizado por la doctora Celia Sánchez-Ramos, profesora de la Universidad Complutense de Madrid, revela que un 35 por ciento de los españoles conduce vehículos de tracción mecánica con lentes mal graduadas o “viejos”, a pesar de que el 85 por ciento de la información que decide las maniobras al volante está determinado por la vista.
Esta actitud, que podría ser calificada de imprudente, puede ser el origen en algunos casos de un accidente de tránsito.
El informe indica también que la mitad los ciudadanos de 65 y más años no tiene bien graduada su visión, un porcentaje que se reduce hasta un 25 por ciento entre los jóvenes.
El estudio recuerda que con la edad se pierde visión, disminuye la agudeza visual y la sensibilidad al contraste y aumenta la sensibilidad al deslumbramiento.
De hecho, el tiempo medio de recuperación al deslumbramiento casi se duplica en los mayores de 65 años hasta llegar a ser igual o superior a un minuto.
Además, en ambientes de poca iluminación se pierde un 20 por ciento de la agudeza visual o capacidad de ver, independientemente de la edad del sujeto, por lo que la doctora Sánchez-Ramos aconseja evitar en lo posible la conducción nocturna.
Mientras tanto, el Libro Blanco de la Visión 2009 anticipaba por su lado que la crisis económica ha condicionado que el nivel actual de utilización de lentes o espejuelos sea menor que en otros países donde las cosas van mejor en esta importante materia.
Por esta misma causa, muchas personas no se gradúan cuando corresponde y utilizan lentes que no son las adecuadas por el costo que conlleva sustituirlas por las idóneas.
En el documento se expresa que si antes de la crisis la vida media de unas gafas era de unos tres años, ahora se opta por aguantar con las mismas hasta que se pueda, lo cual acaba repercutiendo en la calidad de la visión. Y en los menores, esta dificultad “puede ser la génesis de un fracaso escolar”.
CONSEJOS
ÚTILES
A modo conclusión, los especialistas en óptica y oftalmología coinciden en una serie de consejos útiles para que nuestra visión esté siempre a punto.
• Los niños deben ser sometidos a la primera revisión de la vista entre los 3 y los 5 años, pues es a esta edad cuando se puede detectar y corregir precozmente lo que se denomina como ojo vago, o ambliopía.
• A partir de los 15 años, las revisiones deben realizarse cada 24 meses.
• La graduación debe correr siempre a cargo del oftalmólogo pues el óptico-optometrista se limita a que las gafas estén lo mejor graduadas posible, pero sin valorar otras patologías oculares.
• A los niños hay que cambiarles los lentes cada cierto tiempo porque están en fase de crecimiento, mientras que entre los 25 y los 40 años las graduaciones permanecen estables. A partir de esa edad suele presentarse la presbicia, lo que obligará a cambiar de lentes cada cierto tiempo debido a las pérdidas progresivas de capacidad para enfocar de cerca.
• Aunque en el mercado hay lentes de contacto que permiten dormir con ellas, es mejor quitárselas al acostarse y ponérselas al levantarse, ya que pueden presentar problemas de irritación del globo ocular.
• A partir de los 18 años, los afectados de determinados problemas de visión, salvo la presbicia, pueden someterse a una intervención de cirugía refractiva que les permite prescindir de los lentes.
Fuente: http://www.diariolasamericas.com/
En Madrid ya hay una clínica que opera de vista cansada con buenos resultados, ésta es su web: http://www.visiondiez.com/operacion-laser-para-vista-cansada.html
ResponderEliminarVivir sin gafas y sin lentillas es algo poco apreciado por quien no lo ha sufrido nunca. Yo me operé de miopía y astigmatismo y seguramente en un futuro me operaré de vista cansada también.
GRACIAS POR TU COMENTARIO!!!, ES CIERTO QUE HAY ACTUALMENTE OPERACIONES PARA LA PRESBICIA, SOLO QUE NO TODOS LOS PACIENTES PUEDEN ACCEDER A ELLA, YA SEA POR COSTOS O POR OTRAS PATOLOGIAS ASOCIADAS... MUY BUENO EL DATO, Y GRACIAS POR COMPARTIRLO!!! PARA TENER EN CUENTA Y QUIENES VIVEN EN MADRID PUEDAN VISITAR LA CLINICA!!!
ResponderEliminarGRACIAS.
Hola otra vez. Cuando yo buscaba para informarme de la operación de miopía me gustaba la colaboración de la gente y por eso procuro dar la información que tenga, sobre todo si se basa en una buena experiencia.
ResponderEliminarMira, en lo que respecta a precio esta clínica cobra 900 euros por ojo.
En lo que respecta a cada paciente, lo mejor es salir de dudas, y otra cosa buena que tiene esta clínica es que la primera cita es gratuita, por si alguien le interesa se puede pedir online http://www.visiondiez.com/cita-online-vision10.html
Espero que os sea útil :)
GRACIAS POR EL DATO!!!
ResponderEliminarTE ANIMAS A ESCRIBIRME UN E-MAIL?: alepa93@yahoo.com.ar PARA CONOCER UN POCO MAS DE TU EXPERIENCIA EN LA CLINICA...
SALUDOSSS