BRAILLE: UNA HERRAMIENTA PARA PERSONAS NO VIDENTES

A veces damos por sentado que la percepción del mundo que nos rodea es igual para todos nosotros. No es así. Más allá de factores socioculturales, educativos o genéticos, algunos deben luchar y adaptarse a ciertas dificultades sobrevenidas. Todos los días las personas invidentes batallan por abrirse un hueco en una sociedad que habitualmente está construida por y para la mayoría y no tiene demasiado en cuenta a las minorías. El placer y la necesidad de leer es una más de estas dificultades.

Luis Braille, un invidente, que no lo fue de nacimiento, creo un sistema de lecto-escritura gracias al cual millones de personas en todo el mundo pueden tener acceso no sólo a los libros, sino también a la información que nos permite distinguir un baño femenino de uno masculino en un lugar público, saber que medicamento tenemos en nuestras manos o simplemente poder tomar nota del teléfono de la persona con la que deseamos tener una cita.

Lo que hizo Luis Braille en torno al año 1823 fue adaptar y mejorar el Sistema Barbier. El Sistema Barbier, inventado por el militar Charles Barbier, era un método táctil de escritura que utilizaban los marinos por las noches para no delatar su posición.
A raíz de este sistema, lo que hizo Luis Braille, a parte de otras mejoras, fue reducirlo de 12 a 6 puntos, sin por ello perder capacidad de comunicación y ganando, evidentemente, en sencillez.
Aca encontraran un video, donde Alberto Daudén, uno de los responsables de la Comisión de Braille de la ONCE cuenta en qué consiste este sistema de lecto-escritura y cómo facilita la vida de las personas invidentes.