El consumo prolongado de aspirina aumenta el riesgo de DMAE
Varios estudios relacionan el consumo prologando de aspirina con la
DMAE. ABC
El uso habitual de aspirina
parece asociarse con un mayor riesgo de degeneración
macular neovascular relacionada con la edad (DMAE), que es la principal
causa de ceguera en las personas mayores, y parece ser independiente de una
historia de enfermedad cardiovascular y tabaquismo, según un informe publicado
en JAMA Internal
Medicine.
Éste no es el primer estudio que relaciona el consumo habitual de aspirina con esta patología. A finales de 2012, otro trabajo publicado en JAMA, y realizado en casi 5.000 participantes, aseguraba que tomar aspirina durante al menos 10 años parece aumentar el riesgo de degeneración macular asociada a la edad que, aunque pequeño, es pero estadísticamente significativo. «Los resultados de los estudios transversales del uso de aspirina y su relación con la degeneración macular asociada a la edad (DMAE) han sido inconsistentes. La DMAE es una patología potencialmente cegadora para la que la prevalencia y la incidencia está aumentando con el aumento de la supervivencia de la población y el uso regular de la aspirina cada vez más generalizado de personas en el rango de edad de mayor riesgo para esta enfermedad», explicaron los investigadores.
Más de 15 años
En este nuevo estudio, el equipo
de Gerald Liew, de la Universidad de Sydney
(Australia), examinó si el uso regular de aspirina (una o más veces por semana
en el último año) se asoció con un mayor riesgo de desarrollar DMAE mediante la
realización de un análisis prospectivo de los datos de un estudio realizado en
Australia que incluía cuatro exámenes durante un período de 15 años. De 2.389
participantes, 257 personas (el 10,8 por ciento) eran usuarios regulares de
aspirina.
Después de 15 años de seguimiento, 63 personas (24,5 por ciento) desarrollaron degeneración macular neovascular relacionada con la edad. La incidencia acumulada de la DMAE neovascular entre los usuarios de aspirina no regulares fue del 0,8 por ciento en cinco años, un 1,6 por ciento a los 10 años, y el 3,7 por ciento en 15 años, mientras entre los usuarios de aspirina regularmente, la fue del 1,9 por ciento en cinco años, 7 por ciento a las 10 años y el 9,3 por ciento en 15 años, respectivamente.
«El uso habitual de aspirina se asoció significativamente con un aumento en la incidencia de DMAE neovascular», aseguran los autores de la investigación, que señalan que cualquier decisión sobre si se debe suspender el tratamiento con aspirina es «compleja y debe ser individualizada, puesto que actualmente no hay pruebas suficientes para recomendar cambios en la práctica clínica, excepto quizás en pacientes con factores de riesgo importantes para la DMAE neovascular».
nota
La información médica ofrecida en esta web se
ofrece solamente con carácter formativo y educativo, y no pretende sustituir
las opiniones, consejos y recomendaciones de un profesional sanitario.
Las decisiones relativas a la salud deben ser tomadas por un profesional
sanitario, considerando las características únicas del paciente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario