UNA HISTORIA DE VIDA PARA NO PERDERSE...
Y realmente para nadie es un secreto que ese órgano es imprescindible para nuestra existencia desde el punto de vista funcional en el cuerpo humano. En ese sentido, no era la significación que quiso compartir conmigo, Reynerio Hidalgo Gómez, uno de los primeros fundadores de la Asociación Nacional del Ciego, en la oriental provincia de Holguín.
Su referencia al corazón se basaba en lo sentimental, a los valores espirituales, a las motivaciones que impulsan la voluntad, proporcionan fuerzas y enseñan a vivir en condiciones diferentes, luego de perder la visión a la edad de 24 años como consecuencia de una alta miopía y de retinosis pigmentaria.
“El amor ha dado luz a mis ojos”, expresa con ese carisma que lo caracteriza, jovial, emprendedor, indetenible en los deseos de alcanzar los sueños que se ha propuesto, sin afectarle en modo alguno su discapacidad visual para sus ansias de trabajar, pues no ha sido una limitante en su andar por la vida.
“He dedicado toda mi vida y mi juventud a la Asociación que ha constituido para mí el medio para rehabilitarme e integrarme a la sociedad, fundamentalmente a la educación y al trabajo, en todo”.
Ese anhelo de continuar viviendo con el ánimo a la manera que el emana, lo trasmite cotidianamente en su entrega a otros discapacitados visuales. Reynerio ha tenido la dicha de ser el iniciador de la enseñanza por medio del sistema Braille en la provincia de Holguín, misión que continúa de forma voluntaria, todos los sábados.
Muchos discapacitados visuales han recibido las experiencias fundamentales para su rehabilitación, gracias a la dedicación de este hombre que ahora cuenta con 58 años de edad y en quien persiste esa juventud inquebrantable, no obstante el tiempo transcurrido sin ver a través de sus ojos, de los que emerge la luz y de su persona la comprensión y la esperanza para motivar a quienes le rodean.
En su trabajo titulado “Una nueva luz ilumina a los ciegos en Cuba”, Hidalgo, cuenta: “Con una pequeña, máquina de escribir Braille alemana portátil se logró imprimir cientos de cuartillas donde aparecía el alfabeto, signos gramaticales y números. Por medio de esta cartilla y seminarios, antes recibidos en la escuela “Barona Suárez” que radicaba en La Habana comenzó la campaña de alfabetización de los ciegos en Holguín”.
“En coordinación con la dirección de enseñanzas de adultos y la especial del Ministerio de Educación, MINED, se impartieron seminarios a maestros en todos los municipios. Desde 1978 hasta 1980 se desarrolló una campaña de alfabetización a los ciegos y personas que tuvieran su grado de visión muy baja en diferentes provincias. Además de la cartilla Braille se utilizaron reglas y punzones de origen alemán y de la antigua Unión Soviética, lográndose en esa etapa alfabetizas a más de 300 personas ciegas y de baja visión, así como a familiares y activistas”.
“En el 1981, en Holguín, se abrió la primera aula mixta donde estudiaban adultos y niños con programas del Ministerio de Educación y el sistema Braille, tuve la oportunidad de ser el maestro. Posteriormente se extendió al resto de los municipios de la provincia en el año 1982”.
Hidalgo, guarda con mucho cariño esos recuerdos en su memoria, que lo hacen sentir feliz porque el vive con el corazón, desbordado de amor para ayudar a cuanta persona lo necesite. Nuevamente continúa su narración diáfana y amistosa:
“En Holguín se consolidó la enseñanza especial para ciegos en el año 1983, con un grupo de profesores entrenados en la escuela “Abel Santamaría”, en la ciudad de La Habana y partir de ese momento surge la primera escuela para niños con discapacidad visual en la provincia”.
Actualmente en la oriental provincia de Holguín los infantes con discapacidad y baja visión reciben una atención especializada y desde pequeños hasta la condición de adultos tienen garantizada la enseñanza por el Ministerio de Educación para que puedan estudiar y convertirse en técnicos y profesionales útiles a la sociedad.
Fuente: http://www.radioangulo.cu/noticias/holguin/15395-uno-vive-con-el-corazon.html
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